Los casilleros de Emmanuel Clase y Luis Ortiz amanecieron vacíos en la casa club de los Cleveland Guardians. Y en el béisbol, cuando el equipo le quita hasta el uniforme a un jugador, el mensaje suele ser claro: el vínculo se rompió.
Ambos lanzadores están bajo investigación por parte de las Grandes Ligas tras ser acusados de participar en apuestas deportivas, específicamente en apuestas de apoyo sobre sí mismos.
Aunque siguen oficialmente suspendidos con goce de sueldo hasta al menos el 31 de agosto, la decisión del equipo de limpiar sus espacios en el clubhouse deja entrever que los Guardians podrían estar cerrando capítulo con ellos… incluso antes de que la liga emita una sanción formal.
Zack Meisel, de The Athletic, fue quien reveló que los lockers de Clase y Ortiz habían sido vaciados, y Bob Nightengale, de USA Today, no dudó en lanzar la pregunta que muchos ya se hacen: “¿Volverán a ponerse un uniforme de Grandes Ligas alguna vez?”
Clase, de 27 años, ha sido tres veces All-Star y era el cerrador estelar del equipo. Ortiz, de 29, está señalado por actividad inusual de apuestas relacionada con sus propios lanzamientos.
Hasta ahora, MLB no ha revelado públicamente detalles precisos del caso, pero el hecho de que el equipo haya tomado esta medida anticipada habla por sí solo.
Mientras se define su futuro, los Guardianes siguen en la pelea por la postemporada, aunque sin dos brazos que formaban parte de su bullpen. El equipo marcha segundo en la División Central de la Liga Americana, a nueve juegos del liderato.